sábado, 20 de diciembre de 2014

Siniestro total

Primero, la situación: Estoy aprendiendo a conducir. Me encanta y muero de ganas de hacerlo bien. Los primeros días antes de empezar las prácticas estaba realmente nerviosa y pensaba mucho en ello, no por miedo sino porque quería hacerlo cuanto antes. Así que una de aquellas noches...

Soñaba que estaba dentro del coche de la autoescuela, un deportivo rojo. Comenzaba a conducir, la profesora apenas me daba indicaciones, simplemente me dejaba por libre. Pero de repente empezó a agobiarme con consejos, direcciones, mil cosas que yo no podía asumir a la vez. Y entonces, ¡Bum! Me choqué contra el bordillo. En un intento de recuperar la trayectoria del coche  daba un volantazo e invadía el sentido contrario. Resultado: choque frontal contra un todoterreno y varios coches más pequeños también salieron dañados de aquello (todo delante de mi facultad, para mas inri)

Mi profesora estaba histérica, gritando como una loca y me obligaba a bajar del deportivo. Justo cuando ambas estábamos fuera. Un estallido. Humo saliendo del motor. Una explosión y fuego envolviendo el coche. La mujer lloraba desconsolada, gritándome, acusándome de ser una horrible persona, y clamando al cielo que el seguro no cubriría aquello. La iban a despedir y la autoescuela quebraría debido a las magnitudes del accidente. Los conductores del resto de vehículos estaban a nuestro alrededor, gritando coléricos.

Yo realmente no sabía que hacer, era más bien un ente pasivo en el sueño, una observadora, así que imaginaos mi impotencia. En su momento fue bastante agobiante, ahora que pienso sobre ello me hace bastante gracia. 

Por cierto, llevo 4 prácticas y aún no he roto nada, así que espero seguir por ese camino y que el sueño no se convierta en uno premonitorio

jueves, 18 de diciembre de 2014

No hay más

Banal como un muñeco
De trapo
Sin compasión tirado
Que desde el suelo,
Inerte
Los hilos que le controlan valora
como principios de vida
Esclavitud y muerte

Cadenas personales
Que no se atreve a rechazar
Es necio quién asegura
Que no teme a la libertad

Con rabia
Y furia impotente
Al dictado de sus cuerdas baila obediente
Rompe al llanto
Indeciso

¿Hundirse a Ley ajena
O morir por uno mismo?

Son tiempos difíciles para los soñadores

Yo no dejo de madrugar. De responder ante un despertador o ante una madre furiosa. Así que mis sueños siempre quedan partidos. Casi nunca los puedo terminar de forma natural. Me gustaría escribirlos más, contarlos por aquí y sentir que llegan a alguien. Pero no siempre es tan fácil. A veces son un conglomerado de escenas que no tiene sentido relatar, si no que prefiero contar hablando a mis amigos. O simplemente la gracia está en situaciones que ocurren con personas concretas. Entonces, ¿qué os digo? No tiene sentido explicar una situación que viene de 5 años de relación para 5 minutos de sueño.
Otras veces es que los quiero guardar para mi  (͡° ͜ʖ ͡°)
Pero a la gente en general (maldita gente) le dan igual los sueños, no le dan importancia, no los cuentan. O simplemente no los recuerdan. Son tiempos difíciles, sí. Son tiempos difíciles para quienes quieren cambiar el mundo y para quienes queremos vivir en el onírico.

"Son tiempos difíciles para los soñadores" Como decían en Amelie. Pero, aquí estamos para quién nos quiera entender.

A ver si estas vacaciones me dan algo tranquilo en qué pensar y puedo volver a registrar lo que sueño que al final es el objetivo del blog o dejar por aquí alguna otra cosilla.

Felices Sueños

viernes, 5 de diciembre de 2014

Random

Hoy soñé mil cosas. A cada cual más curiosa.

Lo primero que recuerdo es mi novio pegándose con una choni de la ciudad. Entraba defenderle y salíamos huyendo, perseguidos por todo el aquelarre de aquella chica.

Después me perdía entre varias callejuelas. Me encontraba con mi primo, que venía corriendo hacia mí. Yo esperanzada acudía a su encuentro pero, sin motivo comenzaba a pegarme (?) Me veía obligada a huir otra vez, enfadada y sin comprender nada de aquello. Me alejaba llamando "maltratador" a mi pobre primo (en la realidad es un cacho de pan :3)

Decidía esconderme en mi habitación. Allí, por casualidad, encontraba

miércoles, 3 de diciembre de 2014

Pequeña Orionauta

Como he comentado en alguna entrada anterior, de pequeña era capaz de tener sueños lúcidos muy a menudo. Controlarlos, cambiar los aquellos que no me gustaban, intentar volar... Incluso llegué a un punto en el que era capaz de despertarme a voluntad si estaba teniendo una pesadilla. Tenía una técnica para saber si estaba dormida o despierta que consistía en tirarme de la mejilla. Si ésta se estiraba como si fuera de un dibujo animado, no había duda, estaba soñando.

Esa costumbre la conseguí porque, de niña siempre tenía la misma pregunta en la cabeza: "¿Cómo sé que esto no es un sueño? ¿Y si toda mi vida es en realidad lo que estoy soñando? ¿O peor aún,

martes, 2 de diciembre de 2014

Octubre, Insectos

Durante un par de semanas, hace un mes tuve pesadillas recurrentes con insectos. Es algo que nunca me había pasado, tener sueños recurrentes. Aunque estos no eran exactamente iguales entre sí, siempre envolvían dos cosas: enormes bichos asquerosos y mi cama. Y tengo que reconocerlo, desde entonces tengo más asco (y más miedo, sí) a los insectos. Yo nunca había sido así o al menos no de forma tan exagerada. 

Una vez un nido de arañas gigantescas aparecía a los pies de mi cama. Otra vez eran escorpiones. Pero en el último que tuve, que fue el peor de todos, había...

lunes, 1 de diciembre de 2014

¿Orionauta?

Ayer tuve un sueño lúcido, es decir fui consciente de que soñaba. No sólo eso, controlé el sueño. 

Recuerdo que compraba una tabla de surf, enorme y blanca. Me alejaba del sueño que estaba teniendo antes y me iba a la playa. Era un día nublado, con una luz preciosa, esa que se ve a veces después de las tormentas, como si se pudiera ver el aire y éste fuera dorado. Me echaba al mar y comenzaba a remar, subida en la tabla. Llevaba un bañador rojo. Era como el momento perfecto, el presente de uno de esos poemas de Guillén.

Me mantuve en ese trance idílico por unos instantes y entonces me desperté. Estaba muy relajada, muy tranquila. Me encantó aquello y no es la primera vez que me pasa, lo hacía de pequeña de vez en cuando así que, tal vez pueda volver a ser capaz de hacerlo habitualmente. Poco a poco, ¿quizás?

Todo está concentrado
Por siglos de raíz
Dentro de este minuto
Eterno para mí.
Playa de San Lorenzo, Gijón

Y sobre los instantes
Que pasan de continuo
Voy salvando el presente, 
Eternidad en vilo.


Corre la sangre, corre 
Con fatal avidez. 
A ciegas acumulo 
Destino : quiero ser.
Ser, nada más. Y basta, 
Es la absoluta dicha. 
¡Con la esencia en silencio 
Tanto se identifica!
Extracto del poema Más Alla de Jorge Guillén

Es la primera vez en diez años que tengo un sueño lúcido y dice una amiga que podía haberlo hecho más molón. Por favor no me presionéis ;)

domingo, 30 de noviembre de 2014

29/11

¿Y los sueños después de salir de fiesta? ¿A vosotros también se os hacen especialmente extraños? Yo no sé si es por los recuerdos desordenados de la noche, por el dolor en las piernas que te obliga a dormir en posturas raras o por lo que queda en tu sangre del alcohol ingerido; que te hace sentir que la cama esta navegando. Son realmente divertidos. Yo me recuerdo buscándole novia a un amigo o teniendo que aprobar un examen que consistía en bailar en la gogotera.

Lo típico ;)

Buenas noches

viernes, 28 de noviembre de 2014

22/11/2014 Une petite mort

Sueños bajo el estrés (bendito estrés):

Era de noche. Estaba en el Colegio-Universidad sometiendo a votación diferentes aspectos que cambiarían a mejor nuestra vida escolar. Había un chico muy guapo al fondo, que no dejaba de mirarme.

Al terminar la votación me acercaba a él. No era, nada más ni nada menos que Neil Patrick Harris (El actor que interpreta a Barney Stinson en HIMYM) Me acercaba a saludarle, a lo que él respondía magnéticamente, susurrándome al oído lo increíble que había estado hablando antes ((aquello se estaba poniendo ¡legen- wait for it)) Comenzaba a acariciarme la mejilla y a jugar con

Un desestrés

¿No es increíble el mundo onírico? Puede estar pasando cualquier cosa bizarra, pero a ti te parecerá normal. Ya puede ser un hombre que se casa con su gato, o los superpoderes que acabas de conseguir, no hay problema, todo está en orden.

Personalmente creo que bajo el estrés los sueños se hacen incluso más raros. Por lo menos en mi caso. El estrés hace que me cueste mucho dormir. Puedo tirarme 2 horas con los ojos como platos pero muerta de sueño, ¡qué agobio! Al final estos momentos de insomnio son un círculo vicioso. Y no sólo eso. Cuando finalmente consigo dormir me pregunto seriamente al despertar cómo puedo tener sueños tan estúpidos...

Aunque a veces molan...

miércoles, 26 de noviembre de 2014

Nightmares again...

Me gustaría empezar fuerte, este blog no es para menos. Quiero dejar por escrito la peor pesadilla que tuve nunca. Fue una de esas que hizo que me despertara llorando, llena de rabia y sin fuerzas para poder dormirme de nuevo. Cada vez que la recuerdo me sigo preguntando si hay algo que está mal conmigo, si tal vez esté loca o si debería tomármelo en serio. Pero es sólo un sueño... ¿no?

martes, 25 de noviembre de 2014

Primero

Me encanta soñar. Muchos de mis sueños son raros, muy raros; pero merece la pena recordarlos después. Y no sólo me gusta contar los míos, si no que disfruto escuchando qué sueñan los demás. Desde los sueños más dulces que les hacen empezar a pensar que se están enamorando, hasta las pesadillas más oscuras, que les hacen temer de sí mismos.

A veces disfruto intentando sacarles el significado (aunque en realidad no tengan ninguno, ¿quién sabe?) y otras, simplemente con asimilarlos despacito. Siempre son tan curiosos... Me calma pensar que todos soñamos. Todos, sin excepción, aunque a veces ese pesado dormir no nos deje recordarlos.

He creado este blog con la intención de guardar mis sueños más interesantes, contar alguna que otra experiencia rara que mi cerebro somnoliento me permitía hacer de pequeña, y, por qué no, compartir aquello que a veces se me ocurría, a punto de quedarme dormida y no podía resistir a apuntar en un papel.

¿Y tú con qué sueñas?